Sean Carroll, cosmólogo y profesor de física en el Instituto de Tecnología de California, cree que ha puesto fin al debate en torno a la otra vida después de estudiar exhaustivamente las leyes de la física, informa express.co.uk .
El Dr. Carroll afirma que «las leyes de la física que subyacen en la vida cotidiana se entienden por completo» y todo sucede dentro de los límites de la posibilidad.
Él dice que para que haya una vida después de la muerte, la conciencia tendría que ser algo que esté completamente separado de nuestro cuerpo físico, lo cual no es así.
Más bien, la conciencia en el nivel más básico es una serie de átomos y electrones que esencialmente nos dan nuestra mente.
Las leyes del universo no permiten que estas partículas operen después de nuestra desaparición física, según el Dr. Carroll.
Él dijo: «Las afirmaciones de que alguna forma de conciencia persiste después de que nuestros cuerpos mueren y se descomponen en sus átomos constituyentes se enfrentan a un obstáculo enorme e insuperable: las leyes de la física que subyacen a la vida cotidiana se entienden completamente, y no hay forma dentro de esas leyes para permitir la información almacenada en nuestros cerebros para persistir después de que muramos”.
Para su evidencia, el Dr. Carroll apunta a la Teoría del Campo Cuántico (QFT). En términos simples, la QFT es la creencia de que hay un campo para cada tipo de partícula.
Por ejemplo, todos los fotones en el universo están en un nivel, y todos los electrones también tienen su propio campo, y también para cualquier otro tipo de partícula.
El Dr. Carroll explica que si la vida continuara de alguna manera después de la muerte, las pruebas en el campo cuántico habrían revelado «partículas espirituales» y «fuerzas espirituales».
El Dr. Carroll escribe en Scientific American: “Si en realidad no son más que átomos y las fuerzas conocidas, es evidente que el alma no tiene forma de sobrevivir a la muerte.
“Creer en la vida después de la muerte, por decirlo suavemente, requiere física más allá del modelo estándar.
“Lo que es más importante, necesitamos alguna forma de que esa ‘nueva física’ interactúe con los átomos que tenemos.
«Dentro de QFT, no puede haber una nueva colección de ‘partículas espirituales’ y ‘fuerzas espirituales’ que interactúen con nuestros átomos normales, porque las habríamos detectado en experimentos existentes».
Una vez que todos los científicos acepten esto, dice el Dr. Carroll, entonces podrán realmente comenzar a comprender cómo funciona la mente humana.
Él dijo: “No hay razón para ser agnóstico acerca de las ideas que son dramáticamente incompatibles con todo lo que sabemos sobre la ciencia moderna.
“Una vez que superemos cualquier renuencia a enfrentar la realidad sobre este tema, podemos abordar las preguntas mucho más interesantes de cómo funcionan realmente los seres humanos y la conciencia”.