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* Los descubrimientos antiguos continuamente son fascinantes, pero hay varios que amenazan con derrumbar milenios de historia tradicional. * Uno de estos hallazgos son las enigmaticas y enigmáticas estatuillas Nomoli.

* Fueron localizadas en la reducida nación de Sierra Leona, en África Occidental, estas misteriosas esculturas de entre 40 a 70 centímetros de altura han creado abundante controversia en el interior de la arqueología.

Entre los bastantes descubrimientos antiguos, que indudablemente amenazan las escuelas de pensamiento tradicionales en la arqueología clásica, se localizan los estatuillas de Nomoli.

Estas son pequeñas esculturas de roca de 40 a 70 centímetros de altura, que simbolizan con precisión, enigmáticos seres humanoides alterados, a veces con apariencia de anfibio, o de reptil.

Los estatuillas fueron encontradas en las decenios de 1980 y 1990 por las poblaciones locales de Sierra Leona, durante la carrera por los diamantes en África Occidental.

El origen de las estatuillas, llamadas «Nomoli» por los habitantes de la zona, está envuelto en un enigma, dado que no parecen pertenecer a ninguna sociedad africana conocida.

Algunas de estas figuras, fueron localizadas a una profundidad de 50 metros, en la capa geológica que corresponde a la edad entre 12 mil y 17 mil años.

Este hecho ha abandonado a los arqueólogos muy perplejos, dado que esta datación no es una confirmación del conocimiento actual de la arqueología clásica, dado que las culturas más antiguas de la zona se remontan a 4 mil años antes de Cristo. Por lo tanto, ¿De dónde vinieron estos enigmáticos artilugios?

Como explicaron los expertos John H. Atherton y Milan Kalous en una noticia difundido en la revista The Journal of African History, los Nomoli fueron creados y usados en el área en donde fueron descubiertos. Así pues se rechaza cualquier tipo de hipotesis que indique hayan sido traídos desde otro lado en el pasadoa lejano.

Rossano Segalerba, aclara que en algunas de las esculturas Nomoli desvelaron bolas metálicas y piedras que a simple vista vendrían del cosmos. Los examen llevados a cabo por el Museo de Historia Natural de Viena han comprobado que las esferas están hechas de una insolita combinación de cromo y acero.

Varios investigadores han hallado rastros de iridio en las rocas, la mayor parte de arqueólogos conoce que no hay iridio en las rocas de nuestro mundo, a menos que este material sea traído desde el cosmos, como ejemplo, por un meteorito.

¿Quién puso estos pequeños objetos allí? Y, lo que es más notable, ¿cómo se provocó la aleación de metal de la que están hechos?

Las llamadas «piedras de color azul del firmamento», que se localizaron en el interior de las estatuillas, y que no se localiza en otra parte del planeta, son un misterio en el interior de un misterio. Un mito del sitio dice que:

«La parte del firmamento en que viajó Nomoli se transformó en una roca, que se fragmentó mientras caía y rodaba sobre la tierra».

Entre diferentes cosas, es fascinante ver que la palabra «Nomoli» tiene una semejanza con «Nommo«. Así es como se les conoce a los Dogon en África occidental. Los Dogones, según las leyendas antiguos, vinieron a la Tierra desde la estrella de Sirio.

Un mito africana narra que:

«Vagavan sin runmbo, en zonas donde ningún hombre había estado antes». No se les podía mirar a la rostro porque sus ojos eran tan relucientes que causaban ceguera: era como mirar el sol. Se prohibió a estas criaturas ingresar al imperio divino y fueron enviados a la Tierra»

Esta última parte nos remite al mito de la «caída de los ángeles«, mencionada en distintas sociedades, inclusive la judeocristiana.

Según la población local, las estatuas de Nomoli serían un recordatorio de las criaturas divinas exiliadas en la Tierra.

Por lo tanto, ¿qué simbolizan estas figuras? ¿Seres nacidas de la imaginación religiosa de una sociedad perdida, de hace 17 mil años, o son la documentación de antiguos cosmonautas alienigenas, que mantuvieron contacto con nuestros ancestros?

Los expertos incluso están lejos de entender todas las propiedades confusas de los Nomoli. Indudablemente, simbolizan el enésimo capítulo, pero no claro, del pasado de la sociedad.

Por Alejandro