El primero es el castigo de Sísifo, al que muchos conoceréis por ser el fundador y rey de Éfira (nombre antiguo de Corinto). Bueno, pues, fue condenado por engañar a Hades y escaparse del infierno. Esto lo condenó a llevar una piedra enorme hasta lo alto de una colina, sin descanso. Desgraciadamente, cuando estaba a punto de alcanzar la cumbre, el peso de la roca le hizo retroceder obligándolo a empezar de nuevo.

Cabe añadir que el hermano de Sísifo, Salmoneo, fue fulminado por un rayo de Zeus, por jactarse de su superioridad ante el rey de los dioses. En la actualidad, las llamas lo devoran sin conseguir consumirlo. ¿Podéis oír sus gritos?

Iris, Salmoneo y su esposa.

 

Seguimos con el castigo del gigante Ticio, el cual intentó violar a Leto, la madre de Apolo y Ártemis. Por ello, fue castigado a yacer con las extremidades atadas y estiradas, mientras los buitres le picoteaban el hígado.

En tercer lugar tenemos a Tántalo, hijo del mismísimo Zeus. Este sujeto organizó un banquete con todos los dioses del Olimpo. No se le ocurrió otra cosa que servir la carne de su propio hijo, Pélope y osarse a robar la ambrosía de todos ellos. Desde ese día permanece en un estanque rodeado de árboles frutales que desaparecen en cuanto intenta coger alguno de sus frutos. Además, cuando intenta inclinarse para beber del estanque, el nivel del agua baja, impidiéndole beber. 

El lápita Ixión, rey de Tesalia se equivocó al intentar seducir a Hera, pues como castigo fue atado a una rueda que giraba en el aire sin descanso. ¡¡Qué mareo!!

Las cincuenta hijas del rey Dánao, (sí habéis oído bien, cincuenta), asesinaron a sus maridos, bueno, esperad, no fueron las cincuenta ya que una de ellas, las más pequeña, llamada Hipermestra no cometió semejante crimen, pues antes de matar a su amado, Linceo, se enamoró de él, aceptando dicho matrimonio. Como consecuencia están obligadas a echar agua en cántaros con agujeros o a llenar tinajas que no se llenaban nunca. ¡Menuda paradoja!

Permitidme que me toma la libertad de daros un consejo: Si sois hombre y os habéis de casar, elegid a una esposa que mire por la economía doméstica, pues al pobre Ocnos por desposarse con una mujer despilfarradora, fue condenado a trenzar una cuerda, que constantemente era devorada por un burro. El burro debía tener un estómago a prueba de balas, sin duda…

Atlas, Atlas, Atlas. No, no me refiero al libro de mapas, no. Pero fijaos que en algo está relacionado. Atlas, líder de la Titanomaquia fue castigado por Zeus a sostener el mundo sobre sus hombros. ¿La razón? La derrota en la guerra que sostuvieron contra los olímpicos.

El último de nuestra lista es… *redoble de tambores* Prometeo, a quien todos conoceréis por haber robado el fuego eterno de los dioses con el fin de entregárselo a los hombres. La gamberrada le salió cara y dolorosa, pues al igual que Ticio, su hígado era devorado día tras día por águilas, en representación a Zeus. Por suerte fue salvado por Heracles, (Hércules).

Por Sandra