Para la cosmovisión oriental, cuando uno de los dedos, el cual representa un elemento de la naturaleza, entra en contacto con otro, se crea un balance de los elementos.
conforme con las ancestrales enseñanzas orientales, el cuerpo físico está compuesto de cinco elementos de la naturaleza: aire, agua, fuego, tierra y aakash –espacios intercelulares que se localizan en el interior del cuerpo humano–. Y el desbalance de estos elementos podría interrumpir el óptimo funcionamiento del sistema inmunológico, y por tanto provocar una serie de dolencias.
Las deficiencias de estos elementos pueden regularse al conectar una parte del cuerpo con otra a través de los Mudras. Para la cosmovisión oriental, cuando uno de los dedos, el cual representa un elemento de la naturaleza, entra en contacto con otro, se crea un balance de los elementos. En consecuencia, la dolencia causada por el desbalance, se cura.
Los Mudras funcionan a través de la energía electromagnética del cuerpo, creando un balance de los elementos que constituyen la salud del cuerpo. En diferentes palabras, el unir los dedos crea un efecto en el cuerpo humano, principalmente desde que cada dedo representa los cinco elementos:
Dedo pulgar – fuego
Dedo índice – aire
Dedo medio – aakash
Dedo anular – tierra
Dedo meñique – agua
Hay una serie de Mudras que permiten el óptimo balance tanto del cuerpo como la relación mente-cuerpo. Estos ejercicios básicos son sencillos de hacer, pues se pueden realizar en el hogar, trabajo o transporte. Cada postura se tiene que practicar durante 45 minutos, los cuales se pueden dividir en varias partes de 10 a 15 minutos.
Shankh Mudra. Es la mudra de la Concha que se utiliza en varios rituales para anunciar la apertura de las puertas de los templos. Este mudra produce una mejoría en los contratiempos de la laringe, inclusive su práctica regular es capaz de mejorar incluso la voz mientras se pronuncia cantando en voz baja la sílaba OM. La postura es la siguiente:
Surabhi mudra. La mudra de la vaca es eficaz para el reuma y la artritis. La postura es la siguiente:
Shunya Mudra. La Mudra Celeste es un ejercicio especial para los contratiempos y molestias derivados del oído. Atenúa rápidamente el dolor de oídos, curando casi todas sus dolencias asociadas. La postura es la siguiente:
Varuna Mudra. La mudra del Dios del Agua se debe practicar continuamente que se dé un exceso del elemento agua en el estómago o los pulmones –exceso de mucosidad y secreciones–. Es capaz de curar o mejorar contratiempos hepáticos. La postura es la siguiente:
Apanvayu Mudra. La mudra salvadora puede funcionar como método de primeros auxilios cuando se aplica tras los primeros síntomas de un ataque del corazón. Regula gran cantidad disfunciones cardíacas. La postura es la siguiente:
Gyan Mudra. Se le conoce como el Gesto de la Sabiduría Esta postura puede ayudar a erradicar toda una serie de contratiempos, principalmente asociados con la tensión, el desorden espiritual, memoria y concentración. Relaja el estado de ánimo y auxilio a superar molestias tales como el insomnio, somnolencia, depresiones e hipertensión. La práctica de este mudra también intensifica los efectos de los demás mudras. La postura es la siguiente:
Apan Mudra. Esta mudra energético produce mejorías en los contratiempos de las vías urinarias, atenuando los dolores del parto. Auxilio a eliminar las sustancias tóxicas del cuerpo y a depurar todo el organismo. La postura es la siguiente:
Prithvi Mudra. La mudra Terrestre auxilio a compensar una carencia de energía terrestre en el cuerpo, que puede conllevar cansancio físico y una disminución de la vitalidad. Cuando al caminar uno se siente ligero e inestable, puede practicar esta mudra para reestablecer el equilibrio de una figura rápida. La postura es la siguiente:
Vayu Mudra. La mudra del viento reduce el elemento aire en todas las partes del cuerpo. En la medicina ayurveda cuentan 51 clases de “aires”, produciendo trastornos en todas las partes del cuerpo: gota, ciática, reuma, temblor de manos, cuello y cabeza. La postura es la siguiente:
Linga Mudra. Es la mudra recta, la cual aumenta la capacidad de resistencia contra los resfriados, la tos y las infecciones toráccicas, pues produce calor interno. Elimina la mucosidad acumulada en los pulmones. Reduce también el exceso de peso, apoyado por ocho vasos de agua al día y alimentos fríos como yogur con plátanos, cítricos y arroz frío. La postura es la siguiente:
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