Hay una vieja leyenda en Madrid (España) que cuenta una escalofriante cronica de fantasmas en la morada de las Siete Chimeneas, construida en 1577.
La antigua ciudad de Madrid alberga oscuras leyendas entre sus muros, calles y edificios. Una de las más famosas y espeluznantes es la de la leyenda de la morada de las siete chimeneas. Un edificio erigido entre los años 1574 y 1577 por Antonio Sillero y Juan de Herrera, para Pedro de Ledesma. En el presente alberga la Sede del Ministerio de Cultura.
Cuenta la leyenda que alí vivía una dama de nombre Elena, hija de un caballero de la corte de Felipe II y su marido, el capitán Zapata. Su felicidad fue muy breve, al poco tiempo de contraer matrimonio, Zapata murió en la guerra de Flandes.
La adolescente Elena al observarse sola, cuentan que no pudo hacer frente y al dolor y una día apareció muerta en su dormitorio (jamás se esclarecieron las causas de su muerte) y su cadáver se esfumó.
Debido a este hecho ,en los mentideros de la Corte no se habla de otra cosa, un asunto que poco a poco comienza a dar que hablar y a provoca de la superstición, nadie quiso habitar la casa durante los años siguientes.
Varios vecinos, a partir de por lo tanto, afirmaron que, algunas noches, la figura de una doncella vestida de blanco, con los cabellos al viento, andaba por los tejados portando una antorcha en la mano, y además contaron que la dama de blanco se arrodillaba en dirección al Alcázar Real, dándose golpes de pecho.
Hoy en dia, el edificio de la morada de las siete chimeneas, es un lugar raro y en ocasiones evitado por demasiados ciudadanos de la villa y corte de Madrid. Un lugar que, a pesar del devenir de los siglos, incluso produce escalofríos.
Esta cronica salió a la luz en la prensa a finales del siglo XIX, cuando al reformar el edificio, por lo tanto propiedad del Banco de Castilla, se encontraron entre los muros de los sótanos, el esqueleto de una doncella y varias monedas de la era de Felipe II.
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